Yo tengo un Ruger número uno, monotiro, en calibre 243, a los que un célebre artesano cordobes hizo un magnífico trabajo de cara a quitarle peso, tanto en cañón como en culata y, aunque no lo he usado para caza, pues no me considero un gran tirador, me agrupa de maravilla en las pruebas que he hecho con él en el campo de tiro. No es caro, aunque si no lo toca algún especialista, resulta excesivamente pesado para recechos que conlleven largas caminatas.