Este tema de introducir animales sin ton ni son ni asesoramiento alguno es algo que se ha dado y se da con demasiada frecuencia. En unos años, por no saber gestionarlos como es de recibo, comienzan a ser un incordio. Machacan la vegetación de la finca, traen epidemias, cuesta un riñón alimentarlos... y suma y sigue. Pero me da igual que sean muflones, venados, gamos, jabalíes o lo que se tercie. Como se conviertan en un estorbo, ANIQUILACIÓN al canto. La otra parte y no se que es peor, es ver esas fincas superpobladas de animales enfermos, famélicos y de trofeos defectuosos por consanguinidad y hambrunas, animales que van escapando por ''gateras'' teniendo que soportarlos los linderos que no repoblaron ni querían hacerlo. Y ahí, les tengo que dar la razón. Uno no tiene porqué pagar los errores y las negligencias de los demás. El que los soltó, que se encargue de ellos. Ojalá fuera todo tan fácil...