Todo sobre las alergias alimentarias en el perro de caza
Entre las enfermedades del siglo XXI, podemos considerar que las alergias, en su sentido más amplio, son de las más frecuentes, tanto en los perros como en las personas. Por eso, vamos a ocuparnos de las alergias por alimentos en el perro de caza.
Un aspecto importante de entender es que la alergia alimentaria no es un problema de calidad del alimento administrado, sino de una reacción alterada individual.
La carne de buey y los productos lácteos causan el 80% de las alergias en los perros
Los perros pueden presentar reacciones adversas a distintos ingredientes de la dieta por distintas causas (tóxicas, intolerancias, inmunológicas, etc.). La alergia o hipersensibilidad alimentaria se produce cuando el animal desarrolla una reacción inmunológica específica o alergia a uno o varios componentes de la dieta. En la mayoría de los casos se manifiesta como una afección dermatológica, pudiendo en ocasiones combinarse con algún cuadro digestivo de vómitos y/o diarreas.
Según distintas estadísticas, se trata de la tercera causa de alergia en los animales de compañía y, a diferencia de otras alergias, ésta puede aparecer en individuos de edades muy jóvenes o incluso cachorros.
Normalmente no se relaciona con cambios en la dieta y es perfectamente posible que un perro reciba un determinado alimento durante años antes de desarrollar la reacción. Los animales afectados suelen manifestar una respuesta de hipersensibilidad a sólo uno o dos ingredientes específicos de la dieta.
¿Qué suele causar alergia?
Toda alergia, sea del tipo que sea, se produce como una respuesta exaltada ante una sustancia que denominamos antígeno; en el caso de las alergias alimentarias este antígeno suele ser alguna proteína de la dieta.
La carne de buey y los productos lácteos causan el 80% de las alergias en los perros. Otros ingredientes podrían ser algunos cereales, cerdo, pollo, huevo o pescado. Los perros intolerantes al gluten, que es una proteína presente en algunos cereales (trigo, cebada, avena...), los denominados celíacos, son cada vez más frecuentes.
Algunos estudios parecen indicar que un destete demasiado temprano podría favorecer el desarrollo futuro de este tipo de alergias, si bien no está suficientemente demostrado. Un aspecto importante de entender es que la alergia alimentaria no es un problema de calidad del alimento administrado, sino de una reacción alterada individual. Si por ejemplo nuestro perro padece de hipersensibilidad a la proteína del vacuno, el mejor solomillo de ternera será responsable de su empeoramiento.
Los síntomas y el diagnóstico
Los síntomas son principalmente dermatológicos con presencia de prurito intenso (fuertes picores). Como complicaciones aparecen seborreas, descamación, lesiones de rascado, arañazos, mordeduras, etc. Las regiones más afectadas son los pies, las axilas y las ingles. En un 10-15% de los casos aparecen también vómitos y/o diarreas.
No es infrecuente que nos encontremos animales que desarrollan alergias de distintos tipos como a la picadura de pulgas o al polen, que añadidas a una alergia alimentaria complica mucho el cuadro clínico del perro.
El diagnóstico de estas alergias alimentarias se realiza mediante las pruebas necesarias para excluir en primer lugar otros procesos. Si se sospecha de una alergia alimentaria se pueden realizar tres pasos para su confirmación:
A) Suministrar una dieta de eliminación. Consiste en una dieta basada en alimentos que el perro no ha consumido previamente, con lo que los síntomas deben mejorar. Si el animal consumía por ejemplo carne de pollo o vacuno, le cambiaremos a conejo, cordero o venado, y si tomaba arroz se le pasará a patata. Esta dieta de eliminación se administra durante un mínimo de tres o cuatro semanas, pudiendo ser preciso prolongarla en algunos casos hasta diez semanas. En esta fase es fundamental la colaboración de todas las personas que convivan con el perro, pues un trocito de carne o un poquito de pan que le demos un día puede ser suficiente para falsear los resultados.
B) Prueba de provocación. Tras la mejoría con la dieta de eliminación volvemos a administrar la misma alimentación que provocó la alergia anteriormente. Los síntomas reaparecerán en unas horas o en unos cuantos días.
c) Identificación de los ingredientes responsables de la alergia. Lo intentaremos volviendo de nuevo a la dieta de eliminación con desaparición de los síntomas y a partir de entonces ir introduciendo uno por uno los ingredientes sospechosos y observar cuándo se repiten los síntomas de la alergia.
Disponemos en la actualidad también de otro medio de ayuda en el diagnóstico, consistente en un análisis de sangre que incluye gran cantidad de alérgenos (sustancias responsables de la alergia), que si bien no es todo lo exacto que nos gustaría en algunos casos, es sin duda una gran herramienta en el diagnóstico.
Tratamiento
El tratamiento evidentemente será, si conseguimos identificar con seguridad el ingrediente responsable, evitarlo en la dieta. En muchas ocasiones este proceso, en teoría tan sencillo, se presenta mucho más difícil y los resultados no son tan buenos como desearíamos.
Hoy en día todos los fabricantes de alimentos de calidad para animales incluyen en sus productos una detallada lista de ingredientes y así podremos intentar evitar aquellos que provoquen la alergia en un caso concreto. También se dispone de productos completos y equilibrados basados en distintas fuentes de proteínas e hidratos de carbono.
Además, los fabricantes de productos dietéticos ofrecen alimentos con una composición especialmente adaptada para los animales con alergias alimentarias conocidas, incluso en los últimos años han surgido nuevos alimentos para este trastorno, mejorados con una tecnología que fracciona las proteínas y evita la aparición de la alergia.
De todas formas, el mayor escollo que tenemos que superar en el tratamiento es el convencimiento y participación de todas las personas que conviven con el perro; pues el incumplimiento estricto de la dieta conducirá a resultados adversos.
Texto: Manuel Lázaro Rubio/ Clínica Veterinaria Mirasierra.
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