Animado por el amigo Polainas, os envío este primer relato, aunque largo y sin la altura de la narrativa de otros autores de este foro, espero que os guste y esplique que hay otras formas diferentes de cazar también.
Eran comienzos del mes de septiembre, el verano , había sido muy parco en aguas, normalmente no son abundantes, pero este había sido todavía mucho más pertinaz con la sequía, desde finales de mayo no habíamos visto nada de agua. La temporada de codorniz ya estaba casi finalizada, aunque para muchos ni siquiera comenzó debido a la sequedad del terreno, ya que las pocas que criaron, en cuanto se cosecháron trigos y cebadas, no les quedó más remedio que emigrar a otros pagos más favorables; quedaron unas pocas , débiles o pequeñas, refugiadas en los girasoles, que no pudieron emigrar tras la cosecha al entrar la luna llena. Estos de por sí son terrenos fríos debido a su altura, aunque en la estepa castellana, el verano es breve, casi como una primavera… se dice que solo tenemos dos estaciones,…. La del tren y la de invierno. Por lo general las tórtolas y torcaces que han criado, cuando se permite su caza en la última semana de agosto ya se han ido debido a la bajada de temperaturas, es muy normal que desde el 15 de agosto ya nos levantemos con rocío en los rastrojos y alguna que otra escarcha.
A los que nos gusta el campo y madrugar , nos pincha el colchón cuando nos despertamos, no nos importa salir a pasear aunque no tengamos intención de cazar, pero nos gustan esas horas mágicas de los amaneceres. En vista de la fechas, y de la sequia, decidí ir a dar un paseo por el interior del monte a ver que se veía.
Este, es un monte típico mediterráneo de carrascas (encinas de no gran porte es como las denominamos por aquí..), con algunas manchas de roble quejigo en las laderas norte más húmedas. Debido al rigor de la climatología, y el tipo de terreno calizo muy arcilloso, no suelen sobrepasar los 2 mts de altura, y son los bosques que quedaron en las zonas más desfavorables para la agricultura, destinados al pastoreo con ganado lanar principalmente y algo de caprino. Carente de zonas adehesadas, pues estas fueron siempre roturadas, con pendiente siempre descendente, es una divisoria de vertiente de aguas; con continuos y múltiples barranquitos causados por la erosión de las aguas de escorrentía por las tormentas, la vegetación rastrera es muy pobre, algo pasto, eso sí muy fino y apreciado por los herbívoros, de ahí la presencia de ganado ovino, y luego aprovechado también por corzos y ciervos, muchas aulagas y algo de gayubos en las zonas humbrías.
Al llegar al borde del monte, decidí aparcar el coche, coger mis prismáticos y salir del coche. Miré al cielo, estaba amaneciendo con un color azul con nubes anaranjadas difuminadas por las corrientes de aire en altura, el aire me daba en la espalda todavía, por lo que decidí sobre la marcha, he hacer un camino en forma de C, subirme a una especie de atalaya en un cocote de un cerro donde está un poco más despejado el terreno y con visibilidad amplia, pero sobre todo con el aire de cara, es casi como poner un atril en el centro de una plaza de toros. Comencé a caminar por una senda entre dos luces, en la hora mágica de los corzos, pisando casi como los indios con mocasines para no meter ruido, a la vez intentaba leer las huellas del camino pero, estaba muy duro el terreno. A mi paso, unas torcaces, seguramente de paso, ya desperezadas levantaron el vuelo de unos viejos chopos silvestres ,poniendo en alerta a los vecinos, de que un visitante de fuera estaba por aquellos pagos; al poco tiempo, a pesar de haber parado escuché a una corza dar la voz de alarma en lo alto, a más de un ciento de metros y sin haberme visto, solamente por detectar un ruido extraño al pisar las hojas e hierbas secas próximas a un pequeño manantial…debía estar encamada y no le gustó que la despertase…. Ladraba una y otra vez, pero sin poder identificarme, ni establecer concretamente mi posición. Decidí para poder seguir camino, jugar un poco con ella, alejándola del lugar , pero sin que metiese mucho más alboroto, moviendo unas ramas y golpeando entre ellas , intentando confundirla como si fuese otro animal frotándose. Acto seguido continué camino, y lento pero sin pausas proseguí la marcha, en ocasiones hacia oído al escuchar los cantos de diferentes pájaros, y cuando creía escuchar alguna especie de trote por el monte.
Al final, acabo llegando a mi atalaya, voy a tomar posición, es el primer día de esta temporada que venía por aquí, aplasto con mucho cuidado las aulagas para no pincharme al estar tumbado. El aire de cara, no creo que tarde mucho en parar, siempre para como una hora sobre las 8 a 9 a.m. y luego vuelve a soplar ese cierzo. Son todavía las 7:45h, la temperatura baja, unos 5 ó 6 grados, caminando no se notan, paro al estar parado y tumbado en el suelo el cuerpo lo empieza a notar y hasta en algún momento me castañean los dientes y tirita el cuerpo, mientras pienso ..¿ quien me manda dejarme la ropa en el coche…. Si no parece que hiciese tan malo…..?, a ver si levanta un poco el sol y me da en el puesto….Comienzo a otear el horizonte, tengo una visibilidad de cerca de 900 mts en un ángulo de 180º desde mi posición, lo dicho como un atril colocado en la escena de un anfiteatro. Comienzan a pasar por el cielo y siempre con la misma dirección algún grupito de 3, 4 ó 5 torcaces desde los dormideros en lo profundo y abrigado del monte hacia las rastrojeras exteriores para desayunar sus granos de trigo o pipas de girasol. Veo al poco rato como una zorra vuelve de campear, y haciendo pequeñitas paradas buscando algún topillo o ratón, de repente se para, la veo inmóvil orientándose con la mirada hacia un punto, y de pronto un salto como el de un gato con muelles en las patas contra unas hiervas, algo ha cogido… por el tamaño, era como una especie de rata pequeña, pero más grande que un ratón….y yo diciéndome en el interior…si tengo el rifle…… pasa el tiempo… no se vé nada más…, pues es raro, no está tan mala la mañana…. Las hay peores decía para mí..! . Al poco tiempo ya aprecio como bajan despacito un pequeño grupito de ciervas, una encabezando la marcha, una hembra vieja reproductora, una cria de esta primavera y una gabata del año pasado a juzgar por el tamaño, dando pequeños bocados al pasto y ramoneando ya de alguna chaparra de vez en cuando , tomando exquisitamente alguna que otra bellota. A pesar de la sequía, lucían un pelo rojizo precioso brillante , el vientre bien hinchado , repleto después de haber estado comiendo toda la noche y sobre todo bien entradas en carnes pensé para mí, que bien se saben buscar la vida.
Como no veía nada más, pues volvía a observarlas un rato más, hasta que volvía a escudriñar el horizonte y las posibles vías de retorno de otras reses, en una de esas observaciones, aprecié como se quedó como petrificada, la más vieja de ellas, mirando a un punto fijo , 1 minuto, 2 minutos…. Ni se movía, algo había detectado, pero las otras acompañantes continuaban sin signos de atención ni peligro…. Que podía ser…..al final lo veo, una pareja de liebres que andaban jugueteando o de amoríos… ellas sabrían…divertida la escena. Me daba por satisfecho con lo que había podido admirar, pero era todavía un poco temprano y decidí esperar hasta las 9 ó 9:30 h para volverme de camino hacia el coche. Algunos de vosotros os preguntareis, seguro que iban solas las ciervas..??, pues sí; por estas zonas la densidad de ciervas(os) no es muy alta, nada que ver con la zona centro y sur de la península, la berrea cuando se produce, dura de 1 semana a 10 dias como mucho, el comportamiento completamente diferente a otras zonas; este año por ejemplo ni se han escuchado, unos lo achacan a los fríos de esas fechas y otros a la maldita sarna que desde el año pasado, los azota y ha diezmado.
En esta zona la habitan unos ciervos, que les llamamos pelirrojos, muy cuajados en kilos, con un porte magnifico, parecidos fisicamente a los de la sierra de la culebra zamorana; de cuernas marrón castaño medio-claro debido a que el arbolado predominante por la zona y que les da el color son las encinas, de no muchas puntas 12-14-16, pero de muy buen porte con envergadura , amplitud y notable longitud, además con grosor creciente cuatro más alejados de las bases. En otras zonas de la provincia sobre todo en la zona de pinares, tenemos otros que son más grisáceos, mucho más pequeños de tamaño, cuernas oscuras y de palmas con más puntas, pero mucho más delgados, las hembras de estos pelirrojos en muchas ocasiones son más grandes que los propios machos grisáceos de los pinares. Es debido la diferencia de la alimentación, ocurre lo mismo con los corzos.
Pasaba el tiempo y cuando ya estaba pensando en levantarme, veo por un collado, como una hilera de ciervas se dirigen hacia un remanadero de agua a media altura de una falda entre encinas, van una a una , casi en fila india, cogiendo una sendita se dirigen a ese punto, están a unos 600-700mts, pero como van despacito, las voy contando y observando, van muchas me digo….5 ó 6 suele ser ya un grupo numeroso, pero…. Estas son muchas más van un total de 11 y 14….claro, me justifiqué, la sequia les ha hecho juntarse en torno a los manantiales de agua. Se dirigen hacia el charquito de agua en mitad de la ladera, ramonean un poco alrededor, casi ni beben agua , pues vaya…no tienen sed….claro el frio me dije. En estas que aparece con el grupo una especie de ciervo horquillon, que directo se mete en el charco y comienza a revolcarse como un perro en el barrillo, por la derecha, por la izquierda, con las patas mirando al cielo y revolcándose con todo el lomo…. Joer…!!! como disfruta, si parece un marrano en un lodazal. Me puse en tensión y comencé a miran y remirar entre las encinas esperando ver el dueño del haren, pero no observaba nada de nada. Al cabo de unos diez minutos reemprendieron la marcha hacia sus acostaderos hasta que las perdí de vista.
Que contento estaba con lo que había visto, sabía que se bañaban en barro, pero de esta manera más propia de un cochino que de un ciervo nunca lo hubiese creído; vaya lección había aprendido y además pensaba para mis adentros con tono egoísta…….” Ya llegará la berrea más adelante, aparecerá un ciervo de verdad y te va a poner las pilas…” “ y a ese le voy a tratar de poner las pilas yo….”. Feliz y contento volví a deshacer el camino hecho hacia el coche y luego a desayunar, que me lo había ganado.
A partir de ese momento, mi cabeza comenzaba a elucubrar lo que podía hacer en un futuro para hacerme con ese macho rey de la zona y dueño del harén, le hacía mil y una entradas, por un barranco, por otro, estará en tal barranco, en cual, y si viene el aire cierzo, entro por aquí, si es solano por allí si es regañon…..por allá… confieso que más de una noche soñaba ya con el lance, pero al final, era como el cuento de la lechera, si todavía no tenía nada de nada….ni había rey….pero ya sabemos , que cuando se nos calienta la cabeza….
Pasaron ya casi dos semanas y me dije, ya tiene que estar por la zona o muy cerca en busca de hembras, se acercan san Mateo y suele ser la fecha clave por estas zonas. Llegó el fin de semana, cargue la mochila con todos mis trastos, ropa cómoda y calzado lo más blando posible para caminar…mi querido mánnlincher y una hora antes del amanecer camino del monte…..Humm no me gusta nada, hay como neblina y frio 3 ó 4 grados. Aparco el coche, salgo y comienzo el camino en silencio y todavía de noche…. No se escucha nada…raro y la neblina de fuera, aquí es ya niebla… camino casi el km y llego al puesto lo más silencioso posible, saco la ropa de la mochila, preparo el suelo, me tumbo, prismaticos en mano y mochila y rifle en la otra. Comienza a amanecer y nada de nada ni un ruido, niebla cada vez más espesa y eso que sopla algo el aire, me lloran los ojos y se me empañan los prismaticos al mirar…,no se escucha berrear nada de nada ni al amanecer ni antes cuando bajaba de camino, acaba de amanecer, la vista es muy reducida, decido esperar en el puesto, con el frio en ocasiones, los animales se mueven a los encames más tarde…. Son las 10 am y decido levantarme e irme…. No he visto ni ratones… solo una corza, malo…..!!!.
Después de comer, haciendo caso al refrán de “mañanita de nieblas, tarde de paseo..”; decido irme de nuevo al monte en este caso a pistear y cortar huellas recechando. Son las 5:30 de la tarde , de nuevo mochila a las espaldas, rifle y paso pausado observando hasta el más mínimo detalle, busco las sendas por donde suelen pasar de retorno en zonas de arena donde marquen sus huellas y no veo nada… algún zorro, una corza con cria…..paso por un manatial, tampoco están por allí, no hay huellas de ellos, entra algúna jabalina de vez en cuando, corzos a beber…. Pero nada más….recorro barranco tras barranco….pero parece que se los ha tragado la tierra, ya son las 7:30 pm. , comienza a levantarse el aire otra vez, se pone fresco, decido subirme a un alto a ver si veo algo moverse o si se escuchan berrear en algún momento al anochecer ; poco a poco pasa el tiempo, el aire cada vez más frio, penetrante y fuerte, he hace de noche, espero casi una hora, aunque no veo nada de nada, pero tampoco se escucha nada; me vuelvo a casa….
Al día siguiente vuelvo a darme otra oportunidad de nuevo, vuelvo a mi atalaya al amanecer, recorro mi camino en silencio, subo hacia mi atalaya y no escucho nada de nada…mal presagio, amanece, frio y aire pero sin niebla, la temperatura parecida al dia anterior, llorando los ojos por el aire con castañeteo y tiritona de cuerpo a pesar de la ropa que llevo, pasa más de una hora y nada de nada , a punto de retirarme sobre las 9:30 veo una corza , con la cría y un machete de corzo caminando más retrasado pero agrupado con ellas, hacen múltiples paradas careando y mirando a todas partes alertados e inquietos por el ruido del aire entre las ramas de los árboles y su movimiento; lo observo con el prismático , me cambio al rifle , lo meto en el visor con la tranquilidad que dá, el saber que no voy a dispararle, bonito, con el pelo rojizo corto del verano , bien formado, simétrico pero no es lo que busco…. Necesita un par de años más y me digo pummm, ya estás cazado…hala.. hasta otro año, lo sigo un rato con el visor hasta que los he perdido de vista, tras revisar por última vez el amplio entorno con los prismáticos decido levantarme y marcharme a revisar sendas y bancales para saber que pasa….tras dos horas de paseo compruebo con incredulidad que ese grupo de ciervas se los ha tragado la tierra, desde hace un tiempo no hay ni una huella….¿ que ha pasado..
les han disparado y se han ido de la zona…?? Hay un perro de esos de las orejas de punta y rabo bajo, rondando por la zona..?? no se ven ni corzas,,, y es muy raro…. Es el tiempo muy frio….y se han metido en los espesares…. O se han cambiado de zona…de todas maneras, raro muy raro…. Pero eso es la caza en abierto.
Ha pasado una semana más, estamos ya a primeros de octubre, la luna está creciente , casi llena; el tiempo ya ha mejorado y han subido un poco las temperaturas; llega el fin de semana y de nuevo, la moral baja de la semana pasada , se ha recuperado con esperanza y nuevas ilusiones propias de un esperista, no nos rendimos fácilmente .
Hablo con gentes de otras zonas y guardas , los cuales me cuentan que en estos días había comenzado algo de berrea, muy débil, en lo alto de la sierra, lo cual me alegró, dije por fin…. tardará un poco en bajar pero algo habrá al final. No puedo decir que durmiese mucho esa noche, porque cuando sonó el despertador ya estaba cansado de tanto subir y bajar barrancos , de perseguir a mi añorado ciervo a través del monte, de soñar con ese crujido de rama que dá al traste con todo…etc, los sueños, sueños son…., pero se parecen tanto a la realidad….!!.
De nuevo la misma rutina, coche, mochila, archiperres , rifle, senda…..paso pausado, en estas que escucho algo… es un berrido a lo lejos….?. me paro y lo vuelvo a percibir!!….. que alegría, es como un estallido en el corazón, ilusiones renovadas que me gustaría que todos escuchaseis alguna vez, es como si ese macareno al que todos perseguimos y añoramos, anunciase su presencia con un altavoz antes de presentarse en nuestra plaza, el corazón comienza a latir y parece que se nos va salir del pecho. En este momento decido meter la bala en la recamara del rifle para llevarlo cargado hasta el puesto, pues siempre camino con él, descargado por cuestiones de seguridad, a pesar de mi estado físico, ya me he caído rodando por más de una empinada ladera deslizándome hasta 15 mts de culo como si fuese hielo, esas p…piedrecillas calizas tipo garbanzos, sobre terreno duro son muy puñeteras…mi culo con moratones y raspaduras, así como algún que otro pantalón deshecho y rasgado lo atestiguan.
En ese momento…… no puede ser…!!. Me he dejado el cargador en el coche y no llevo balas jamás, únicamente las 3 del cargador… es rececho y solo necesito una, me sobran otras dos. Me dije Me ca…. En mis muelas…..no puedo ser más tonto…. Decido dejar la mochila en el camino y volver lo más ligero pero sin ruidos al coche a por el cargador. Una vez en el vehículo, lo recojo y vuelvo por la senda, está ya amaneciendo, lo vuelvo a escuchar, se dirige a pasar por debajo de la atalaya, me apresuro a adelantarlo e paralelo, cuando estoy llegando a la atalaya lo vuelvo a escuchar….está completamente encelado….pero me lo he dejado atrás y se está cruzando por la senda que he bajado, creo que ha cambiado la ruta… ¿ que hago….me quedo…. No..!! me vuelvo hacia atrás seguro que lo acabo viendo en algún puntal, lo he visto fugazmente un instante con los prismáticos entre las matas y era de color rojizo castaño oscuro… ese es viejo, la cuerna no me ha dado tiempo a verla… decido volver sobre mis pasos, la tierra reseca al subir las temperaturas cruje de lo lindo, eso pisando sobre donde no hay gravilla, que sobre la hojarasca de las encinas o aulagas secas es como llevar un tambor y trompetas….que ha pasado..?? no lo escucho, me ha barruntado…decido quitarme las botas… con calcetines meto menos ruido aunque me pinche… ya se sabe, “ sarna con gusto no pica..” tiene que estar cerca… pero no berrea, me quedo quieto, inmóvil intentando hace oído…. Nada de nada, ni ruido, ni ciervas, ni el ciervo pasan unos minutos cerca de 10, interminables y lo vuelvo a escuchar brevemente…..No me Jo……acaba de pasar por debajo de la atalaya se va a los encames…. ¿Pero quien me manda moverme de la atalaya..
si siempre pasan por aquí cerca…!!! seré tonto…!!! Bueno otra lección más , ya se sabe, “ las letras con sangre entran”. Después de esta lección decido subirme a la atalaya de nuevo y esperar…ya no vuelvo a escucharlo, veo otro par de ciervas solas de recogida monte adentro y unas corza sueltas con crías y otro machete de corzo a su aire.