Esperas al Jabalí
GENERAL => Relatos => Mensaje iniciado por: Morao en Agosto 30, 2015, 02:28:39 pm
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Os cuento mi primer aguardo de mi vida cuando tenia 14 años.Mi familia tiene una finca en la sierra y hemos tenido siempre podencos para la caza menor y mayor. Fue en enero mi primer aguardo, cuando tenia 14 años, estabamos cogiendo aceituna y mi padre me dijo de hacer una espera en los cebaderos. Al acabar a las 6 de la tarde cogimos las armas.Mi padre me llebo a un cebadero y el se fue a otro cebadero.A las 18 30 estaba puesto, me puse en un cebadero situado en un bancal pegado a una repoblacion de pino a la falda de la sierra.Me puse con mi escopeta y sin linterna porque entonces no tenia, al sentarme me enchufe un cigarro pues cualquiera fumaba delante de mi padre entonces con 14 años. Al rato escuche algun ruido en los pinos pequeños pero muy lejos y muy flojos , pense que seria algun conejo. Al oscurecer sobre las 18: 45 me di cuenta que estaba lejos del cebo para tirar a oscuras y con la escopeta y me cambie mas cerca a unos 15 metros del maiz al lao de una retama.A las 19:00 mas o menos empece a escuchar crujir ramas entre la repoblacion de pinos, el corazon se me salia por la boca, al llegar al borde del bancal el bicho soplo 2 veces y me entro como una pava, me paso a un metro de la retama moviendo el rabo me adelanto, era muy grande me temblaban hasta los brazos estaba a punto de llegar al maiz lo tenia encarao con la escopeta y me temblaba el alma la adrenalina me salia por las orejas y pummmmmmm, el guarro se puso a dar saltos y a roncar, yo pensaba que iba a caer muerto, el guarro salio como un toro al bancal abajo en vez de salir pal monte y le tire el segundo, se fue.Mire a ver si habia sangre y nada, aun no me creo que no lo tocara pero asi fue ni gota de sangre. Era un guarro tremendo le tire muy precipitado viendole el culo inclinado un poco, me pudo la inexperiencia y el ansia y no lo deje cumplir. Gracias a esa espera es mi modalidad favorita estoy envenenao con los guarros.Recuerdo este aguardo como si fuera ayer y hace ya 11 años.
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Y dentro de 11 años seguirás recordándolo como si fuera ayer...
Por lo que comentas respecto a que salió corriendo hacia abajo, en vez de meterse al monte cércano, seguramente fuera pegado, aunque no dejase sangre... quien sabe a estas alturas!!
morao, que mejor arranque en el foro que contarnos tu primera espera, bienvenido a bordo!!
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Con esa primera espera hay que engancharse a lo nuestro si o si.
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Como para no marcar, mi primer lance con ellos fue a esa edad tambièn y han pasado casi 30 y oye como si hubiese sido el fin de semana pasado y eso que no le toqué un pelo con las balas que me hice del calibre 20.
Ya estás cogìo pa los restos, como tiene que ser.
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Con 14 años y escopeta del 20, y con calibre artesano además, bastante hiciste con darle un buen susto. Yo desde luego hubiera firmado a los 14 años una experiencia como esa. Tienen razón los que dicen que esa espera no se olvida nunca. Como debe ser.
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Nuestros primeros aguardos nunca se olvidan pasen los años que pasen ;) gracias por compartirlo Morao.
Un saludo.
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....es lo bueno que tiene el vivir con tanta emoción el aguardo....que cada vez que haces memoria de alguna de tus esperas, la vuelves a revivir y recordar como si hubiera sido ayer.
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La primera siempre se recuerda de forma entrañable. Un saludo.
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buen comienzo tuviste, sin pieza pero bien vivido como para engancharte, desde entonces ya te abran caído bastantes
y que sigas, un saludo
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El primer aguardo y el gorrino pasando a un metro es para que te temblarán los brazos, las piernas y las orejas.... esa sensación se queda ahí grabada para siempre.
Gracias por contar esa primera vez.
saludos.
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Este relato,es una buena muestra de que lo que engancha a esta modalidad,no es el jabali ni su trofeo,sino las sensaciones que experimentamos para hacernos con el.Eso si es inolvidable,sobretodo cuando se siente por primera vez.Gracias por compartir tu primera experiencia.
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Es verdad las primeras esperas y el primer jabali se quedan grabados para siempre muy buen relato Morao un saludo