Encima tuve hace poco un guarro dentro del visor y no lo tiré. Y podía ser bueno. Pero no lo tiré. Y ya no se que pensar. Una cosa es indultar conscientemente y otra subconscientemente. No se que me pasa pero no entiendo que es lo que pasa.
A alguien os ha pasado esto. Estoy en una fase en la que me cuesta trabajo quitarle la vida a un guarro. Espero que sea pasajero. Tanto romanticismo y el estar casi todos los días manejando jabalies vivos creo que me está afectando.
Creo que te comprendo a la perfección, eres un CAZADOR y no un matarife, tienes un montón de trofeos ya y no te hace falta la carne porque la tendrás a espuertas.
Para disfrutar del lance te basta con estar allí para sentirlo y no matar es una opción tan digna como la que más.
Sencillamente te admiro amigo Contraire.
A mi me pasa algo parecido con la perdiz roja en mi coto, uno de los últimos lugares donde se ¿crían? (a día de hoy tengo mis dudas) duras y bravas perdices de sierra. Ha habido años que por su escasez ni siquiera las he apuntado, las he asustado para que aprendieran a ponerse a salvo.
Más tarde en momentos de abundancia no me ha importado colgar de la percha cuatro o cinco de ellas pero siempre cambiando de bando y de terreno para no acabar con todas.
Este año no pienso salir a cazar. Me vale así, no quiero ser complíce del genocidio, no quiero ver las últimas perdices de mi tierra a la que adoro, yertas y colgadas del cinturón de un CAZANDANGAS que nunca las amó, tan solo llegó a codiciarlas. No las merece, el único esfuerzo que le llevará a conseguirlas será el acosarlas y dispararlas con acierto. Demasiado poco para terminar con un pájaro tan grande. Sentiré lástima por ellas y por él. Más le valdría tener menos puntería y más respeto.
Que pena y que mal se siente uno hablando de ciertas cosas, no me extraña para nada que indultes a los jabalíes Contaire, nada en absoluto.
Saludos.