El fotógrafo francés Eric Poussin grabó a un oso y tres lobos en una tensa competencia por la posesión de un ciervo muerto en una zona del Parque Natural de Somiedo (Asturias). Según la Fundación Oso Pardo, “estas imágenes [cedidas por Eric Poussin a la FOP] recogen gráficamente por primera vez en la Cordillera Cantábrica la relación de competencia entre los dos grandes carnívoros de nuestras montañas ante un animal cazado o una carroña. El ciervo, que probablemente fue cazado por los tres lobos a lo largo de la noche, fue disputado por un oso, que se alimentó de él mientras los lobos observaban e intentaban recuperar su presa. El oso –con síntomas de alopecia, aunque aparentemente en buen estado físico– tapó con tierra el cadáver del ciervo e intentó alejar a los lobos, pero en cuanto se retiró con las primeras luces del día los lobos destaparon y comieron de su presa. Horas más tarde, ya entrada la mañana, hicieron aparición las aves carroñeras, primero los cuervos y después una veintena de buitres leonados. Sorprendentemente apareció un buitre negro, especie mediterránea de presencia ocasional en la Cordillera Cantábrica, y también un alimoche acudió al banquete. En poco tiempo los buitres acabaron con los restos del ciervo, reflejando la importante labor que realizan para la eliminación de carroñas en el campo”.