Nota de la FCCyL: ‘Se inicia la cruzada contra el roedor. Parece que otra vez ya todo vale’
La Federación de Caza de Castilla y León (FCCyL) ha enviado otra nota de prensa a los medios de comunicación en relación a la medida de control de una posible plaga de topillo campesino, basada en el uso de veneno, en concreto, cereal tratado con bromadiolona, por parte de la Consejería de Agricultura de Castilla y León.
Según la FCCyL, algunos agricultores han esparcido ya por terrenos de Ávila y Salamanca este cereal envenenado, sin esperar a las indicaciones de Agricultura, “sobrantes de los arsenales que se distribuyeron en 2007 por la Consejería de Agricultura y que no fueron ni retirados del campo ni reclamados a los agricultores que se repartieron”. Ante esta noticia y otras noticias relacionadas aparecidas en los últimos días, la FCCyL se ha puesto en contacto a la Consejería de Agricultura, de Medio Ambiente y al Seprona de la Guardia Civil para buscar alternativas y soluciones a este tema y que vigilen el cumplimiento de los protocolos legales en la colocación de estos venenos.
La nota de prensa es la siguiente:
“Que cruz tan pesada tiene que aguantar la naturaleza de esta autonomía y todos los que la amamos con las plagas cíclicas del topillo campesino y con las brillantes medidas para su control de nuestra Consejera de Agricultura, que siempre busca ‘su solución’ con la dispensa de venenos, en este caso, cereal tratado con bromadiolona, que se distribuye en el campo y que está presto ya a repartirse para prevenir la, ahora mismo supuesta, expansión del topillo y su efecto sobre las futuras cosechas.
Decíamos en nuestro anterior comunicado, cuando conocíamos la adquisición de 48 nuevas toneladas de cereal tratado con bromadiolona (sumada a la del año anterior, que no se utilizó), que se empezaba a abrir la veda contra el medio y las especies y más aún si cabe cuando distintos responsables anuncian la próxima utilización de veneno y ejecutan medidas como quemas, que se han demostrado ineficaces, limpieza de cunetas, linderos, etcétera.
En este ambiente de cerco y exterminio al topillo parece que todo vale y algunos desaprensivos ya han hecho de las suyas, esparciendo cereal tratado con clorofacinona en distintas comarcas de Ávila y Salamanca (Madrigal de las Altas Torres, Cantalapiedra), que no es difícil suponer son los sobrantes de los arsenales que se distribuyeron en 2007 por la Consejería de Agricultura y que no fueron ni retirados del campo ni reclamados a los agricultores que se repartieron.
Si bastantes problemas tenemos los que defendemos el medio natural denunciando las decisiones políticas que, amparadas en la legalidad, adopta la Consejería de Agricultura, ya sólo falta que en esta guerra abierta al topillo no sea necesario ni siquiera respetar esa legalidad.
No vamos a repetir otra vez que todos conocemos el grave problema que supone para el sector agrario, al que respetamos y apoyamos, y entendemos que se deben tomar medidas, pero hay otras fórmulas menos nocivas para la naturaleza, que ya hemos explicado muchas veces, pero no nos quieren oír ni escuchar los razonamientos de nuestros técnicos.
Ante este cúmulo de noticias que se vienen sucediendo en los últimos días en los medios, ya se han producido comunicados de denuncia de todo tipo de organizaciones de defensa de la naturaleza (incluso con acuerdo de cazadores y conservacionistas).
Hoy conocemos a través de los medios de comunicación que ni siquiera las principales organizaciones agrarias, ASAJA y COAG, aprueban, sino que califican de barbaridad, el uso de venenos para controlar los topillos.
En el ejercicio de nuestra responsabilidad, como representantes de los cazadores y gestores de cotos, la Federación de Caza de Castilla y León se ha dirigido a los tres organismos que tienen algo que decir en vía administrativa sobre este asunto.
A la Consejera de Agricultura le hemos aclarado, en primer lugar, que muchos agricultores son también cazadores y que tenemos un interés legítimo en el asunto, porque las medidas adoptadas en anteriores ocasiones afectaron muy gravemente a las poblaciones cinegéticas. Le hemos recordado que ni siquiera se ha dignado respondernos a los tres escritos que le hemos dirigido hasta la fecha. Le solicitábamos cosas tan raras como medidas para la recuperación del hábitat tras los envenenamientos del 2007, le ofrecíamos nuestros técnicos para integrarse en la Red de Vigilancia Fitosanitaria y le informábamos del uso de venenos aplicados en el blindaje de semillas.
Tras la aparición de cereal impregnado con clorofacinona en algunas comarcas, ahora le hemos pedido:
1. Que nos diga qué tipo de medidas han adoptado respecto a la publicación de esta denuncia.
2. Que se obligue a la recogida inmediata de estos venenos vertidos de manera delictiva.
3. Que nos informe de los pasos dados al respecto para preservar a las especies.
Resulta paradójico que esta Consejera lo fuera en su día de Medio Ambiente y más aún que los cazadores suframos todavía una regulación dictada en su mandato, por la que si aparecen especies muertas por envenenamiento en un acotado este se puede cerrar para la práctica cinegética en base al eufemismo de la recuperación de la fauna.
Hemos solicitado a la Consejería de Medio Ambiente que, en cumplimiento de las competencias que le otorga la Ley, tutele y denuncie actuaciones que sean contrarias a la Ley y que exija que el control de la plaga por Agricultura se haga con las debidas garantías, con un protocolo que no afecte al resto de las especies y por personal profesional.
Al máximo responsable del Seprona le hemos alertado de la actual situación en las comarcas que han aparecido ya venenos y la más que previsible campaña de control del topillo.
Le hemos trasladado nuestro escepticismo sobre el cumplimiento de los protocolos legales en la colocación de los venenos, conocida la experiencia en 2007, y le hemos solicitado que haga cumplir la Ley y que realicen un control efectivo de esta campaña y denuncien si comprueban actuaciones no autorizadas. Le hemos pedido también que investiguen estos primeros delitos ecológicos que hemos apuntado e identifique a los presuntos responsables.
Previo a otra posible vía de denuncia, la Asesoría Jurídica de la Federación está preparando un dossier informativo y, en su caso, de denuncia para la Fiscalía General del Estado y en concreto para la Fiscalía Coordinadora de Medio Ambiente a la que ya se informó a petición suya tras anteriores actuaciones de la Consejería de Agricultura.
La Federación de Caza de Castilla y león va a lanzar una circular informativa a todas sus sociedades y va a pedir a los cazadores colaboración en la tutela de la correcta y legal utilización del veneno y en la localización de especies muertas. Se va a establecer un procedimiento, con la intervención de las autoridades administrativas que correspondan, para poder utilizar todos estos datos ante la propia Justicia, si fuese necesario.
Los cazadores hacemos muchos esfuerzos personales y económicos para preservar a las especies cinegéticas y somos, salvo que alguien nos demuestre lo contrario, los únicos que pagamos por aprovechar un recurso con las prevenciones que la ley establece con todo el rigor, para que permitamos ahora que todo se eche por la borda por intervenciones que van a terminar de rematar a algunas especies cinegéticas y no cinegéticas. Ya tuvimos un triste anticipo en 2007 que ahora mismo se nos antojaría definitivo”.
Tema: NO HAY PLAGA DE TOPILLOS (Leído 1350 veces)